En el día… ¿Candelabros o candeleros?

Muchos y con justa razón se sorprenderán por la interpretación que puede generar el título de este artículo, pero antes que nos rasguemos las vestiduras, voy a comenzar indicando que lo más apropiado para el uso de estos elementos es durante la noche, lo que no quiere decir que en el día esté prohibido o sea incorrecto utilizarlos, pero solo como ornamento.

El placer de comer, se inicia con el espectáculo de una mesa puesta con estilo, pero comprendamos bien que al mencionar la palabra estilo, no pretendo que se entienda a un derroche de lujo o de mesas de cuentos de hadas y fantasía.

Una mesa puesta con estilo es aquella en la que se refleja el buen gusto del anfitrión, no la que está cargada de adornos caros e innecesarios muchas veces, no es aquella que tiene una vajilla de Flora Dánica o copas de Bohemia, una mesa puesta con estilo no es la que derrocha lujo sino armonía y sencillez… nunca olvidemos que muchas veces menos es más y por lo mismo una mesa mientras sea más sencilla, más elegante será.

Todo está en la elección de los tonos y contrastes correctos, la prolijidad y buen estado de la vajilla, que bien puede ser de cualquier marca, lo importante será verificar el estado en el que se encuentra, no debe haber ninguna pieza desportillada o con rayones, y muy importante es que se utilice un solo modelo para que haya armonía y equilibrio en la mesa, de la misma manera los cubiertos deben ser de un solo juego… evitar utilizar la combinación de varios por la pérdida de algunas piezas, las copas o en su caso los vasos deben estar perfectamente limpios y transparentes, y siempre procuremos que sean de cristal.

La mesa familiar generalmente es más informal y se puede prescindir de algunos elementos como el plato de sitio, base o fondo, o de las copas de agua, vino tinto y vino blanco, que podrán ser sustituidas por una sola copa o simplemente por un vaso, según sea necesario, además, como sabemos, en la mesa solo debe estar lo que se utilizará, sería absurdo colocar una paleta de pescado con su tenedor si no hay ese manjar en el menú.

Debemos recordar que esta en nosotros el saber tratarnos bien, si nos acostumbramos a tener una linda mesa, donde además de lo estético sea prolija, no será muy difícil para nuestros hijos desenvolverse de manera espontánea y natural fuera de casa, además que lo disfrutarán.

No menos importante es la ornamentación de la mesa, podemos utilizar lindos pero bajos y sobrios centros de mesa como flores, que permitan que los comensales que están frente a frente puedan hablar sin necesidad de estirar el cuello, además debemos tener el cuidado de elegir aquellas que tengan menos fragancia, pues podría interferir en el gusto de los comensales a la hora de comer, también se pueden utilizar piezas de porcelana o plata, candeleros, candelabros e incluso frutas entre otros.

Es importante que siempre haya un centro de mesa, aun en las mesas familiares o informales, de lo contrario, nuestra mesa quedaría estéticamente incompleta.

Generalmente, los candelabros se utilizan en mesas que son para más de 12 personas, principalmente por un tema de espacio ya que tienen varias ramas para sostener varias velas a diferencia del candelero que solo sostiene una.

Muchas personas piensan que no es correcto el uso de candelabros o candeleros durante el día, en un almuerzo, pero en realidad sí puede ser utilizado siempre y cuando sirva únicamente como parte de la ornamentación, es decir no se debe prender las velas como normalmente lo haríamos durante la noche.

Una cena a la luz de las velas puede resultar muy conveniente para destacar el arreglo de la mesa, si bien sería interesante bajar la intensidad de la luz eléctrica del comedor, debemos considerar que el exceso de iluminación es tan desagradable como la falta de ella, apreciar y distinguir los alimentos que vamos a injerir es muy importante, además de poder apreciar los colores y la ornamentación misma de la mesa.

Si hemos decidido utilizar candeleros o candelabros en nuestra mesa, debemos tener cuidado de elegir velas de buena calidad, de esta manera evitaremos el derrame excesivo de gotas por el derretimiento de la cera y también que salpique y se manche el mantel, o peor aún, que salpique a alguno de los comensales.

Las velas deberán ser encendidas algunos minutos antes de que pasen los comensales a la mesa, nunca hacerlo cuando ya se encuentran sentados, además sería muy inapropiado tener que pasar el brazo entre los comensales para poder hacerlo. Deberán permanecer encendidas durante toda la comida, y de ninguna manera deben ser velas perfumadas, ya que al igual que el aroma de las flores, podrían interferir con nuestro sentido del gusto.

Aunque hay lindos y llamativos colores, lo recomendable es que las velas para una mesa sobria y elegante sean de color blanco o crema, salvo que se trate de una mesa temática como en la época de navidad, donde seguramente unas velas verdes o rojas harán tono con la ocasión. No olvidemos que si utilizamos candelabros, todas las velas deben tener el mismo tamaño.

Recuerden que al montar una mesa, por muy sobria que sea, y por lo mismo, si utilizamos elementos sencillos, tratemos de que todo sea lo más estético posible… que haya una perfecta armonía, el criterio y buen gusto del anfitrión es fundamental.

Para concluir, ya que hemos hablado de los candeleros y candelabros, me voy a permitir hacer una sugerencia… en algunas ocasiones, tenemos candelabros con velas permanentes en otros ambientes fuera del comedor, encima el piano por ejemplo, estas no deben parecer nuevas, y si lo son, podemos prenderlas por un segundo y apagarlas inmediatamente, de esta manera el pabilo parecerá usado.