¿Etiqueta del teléfono?
Cuál de estas dos expresiones es la adecuada… “Protocolo para hablar por teléfono” o “La etiqueta del Teléfono”.
Si bien es cierto que la importancia de comunicarnos a través del móvil o de un teléfono fijo tiene el mismo valor y relevancia que la comunicación directa y personal entre dos o más personas, es necesario hacer algunas precisiones que marcan la diferencia, sin embargo, en ambos casos, mostramos nuestros buenos hábitos y costumbres.
Al igual que el protocolo no es saber escoger el atuendo, o como de un tiempo a esta parte se lee en las redes sociales, el protocolo no es saber elegir el outfit, como tampoco es tener conocimientos sobre el montaje de una mesa.
En el primer caso nos estamos refiriendo de manera evidente al código de vestimenta o Dress Code que se relaciona más a la imagen, el saber ser y saber estar, pero de alguna manera, está relacionado a la etiqueta, y el segundo caso, más tiene que ver con las buenas maneras y el comportamiento social pero ambos son parte de la etiqueta social.
Por otra parte, el decoro y los usos sociales están relacionados de manera circunstancial con el protocolo, pero no debemos confundirnos ya que no son lo mismo, el protocolo no es ser amable, no es urbanidad, ni buenos modales, el protocolo no es moda o imagen.
El protocolo es un conjunto de normas y/o tradiciones, que sirven para regular, planificar, organizar, coordinar y supervisar el perfecto desarrollo de las ceremonias y sus formalidades, es la normativa o conjunto de reglas que son legisladas o establecidas por los usos y costumbres, entonces decir: “el protocolo para hablar por teléfono” está fuera de lugar, en todo caso debemos hacer referencia a la etiqueta social, a las buenas maneras, la urbanidad y el comportamiento social, pero tampoco podemos decir “etiqueta del teléfono”, como cuando se oye o lee por ahí decir “la etiqueta del vino” para referirse a la manera correcta de beberlo, en todo caso sabemos que la etiqueta del vino es aquella marca que normalmente es de papel y está colada en la botella, donde está la información y todos los datos importantes para el consumidor.
En todo caso, las expresiones que utilicé al inicio de este articulo (protocolo para hablar por teléfono y etiqueta del teléfono) son absolutamente incorrectas, lo más apropiado será hablar de “Reglas de Etiqueta para utilizar el teléfono” pues como he mencionado en reiteradas oportunidades la etiqueta está en todo momento.
La palabra “Etiqueta” es definida por diferentes autores como un conjunto de reglas y formalidades que se deben aplicar en determinados actos y eventos, se dice también que es la guía social que nos muestra el respeto por las personas, culturas y costumbres, manteniendo los buenos modales en todo momento y lugar, valga la oportunidad para mencionar que los complementos de la etiqueta son la cordialidad, la hospitalidad y principalmente el respeto. La Etiqueta es la expresión de cortesía entre anfitriones e invitados de manera recíproca.
¿Por qué es importante tener en cuenta la etiqueta en este caso?
Si bien una conversación por el móvil o el teléfono fijo simplifica y acorta distancias para poder comunicarnos en cualquier momento, lo cual evidentemente se constituye en una ventaja considerable, debemos estar conscientes que nuestra capacidad de comunicación se reduce significativamente, pues al no ver la expresión y gestos de nuestro interlocutor, muchas veces es difícil interpretar de manera correcta lo que se quiere comunicar y es ahí donde pueden surgir susceptibilidades… origen de muchos problemas, y es únicamente por que el mensaje no llega como realmente deseamos y esto tiene que ver con el lenguaje corporal pues este último revela y envía información nuestra de manera automática e incluso sin darnos cuenta. Nuestro cuerpo transmite nuestras intenciones, sentimientos y estados de ánimo a través de mensajes como la postura, los gestos y las expresiones faciales, incluso nuestra apariencia que por sí sola habla de nosotros.
El componente verbal se utiliza para comunicar información y el no verbal para comunicar estados y actitudes personales.
Según el investigador Albert Mehrabian el impacto de un mensaje verbal (palabras) en términos porcentuales es del 7%, cuando es vocal es decir respecto al volumen, tono, entonación empleada es de un 38% y finalmente el 55% se refiere a las señales y gestos que emite nuestro cuerpo.
Por consiguiente, podemos darnos cuenta lo complicado que es transmitir nuestro estado de ánimo e intenciones a través de una llamada telefónica, ocurre lo mismo y tal vez en mayor grado cuando enviamos un mensaje de texto, en ninguno de los dos casos vemos a nuestro interlocutor (salvo que sea una vídeo llamada), es decir que el receptor, solo dispone del 7% de la información que nosotros enviamos, mientras que el restante 93% queda con nosotros.
Es por esta razón que debemos respetar ciertos códigos o conductas cuando hablamos por teléfono:
Saludar con cortesía sin duda influirá para que la conversación sea cordial desde un inicio.
Procuremos utilizar siempre palabras amables.
Evitemos ser cortantes al hablar, no es lo mismo decir “sí, con mucho gusto” que un simple y cortante “sí”.
Definitivamente expresarnos con la mayor claridad posible, permitirá que el mensaje llegue como deseamos: la entonación, vocalización y volumen son muy importantes ya que podemos poner énfasis en lo que decimos cuando es necesario considerando que el interlocutor no puede vernos, pero no confundamos el volumen con hablar a gritos.
Como mencioné líneas arriba, uno de los complementos de la etiqueta es el respeto, y por lo mismo no debemos realizar llamadas en horarios inadecuados, evitemos llamar a la hora del desayuno, almuerzo y cena que es cuando generalmente estamos con la familia
Por supuesto llamar a altas horas de la noche sería una desconsideración total, salvo que se trate de algo urgente o realmente importante.
Estos son solo algunos tips que todos deberíamos seguir. Si deseamos hilar fino, por supuesto hay mucho más.
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